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Celebrando el día de la mujer.

Este día no tiene un origen alegre, hace mas de 100 años cientos de mujeres alzaron la voz para exigir derechos, mujeres trabajadoras que luchaban por mejores condiciones y salarios, después de terribles acontecimientos y la muerte de muchas obreras.

A raíz de todas estas movilizaciones en diversos países (Iniciando en Estados Unidos) se celebra el día de la mujer, y aunque se han logrado avances en buscar la “igualdad de genero” y los “derechos de las mujeres” no solo trabajadoras sino en general, aun queda mucho por hacer.

Desde mi humilde punto de vista es imposible pedir igualdad, no somos iguales, a pesar de los grandes esfuerzos de miles de mujeres por estar a la par de los hombres en miles de actividades no se puede llamar igualdad a tener diferentes condiciones.

Me refiero a que como mujeres podemos llevar a cabo las actividades que realizan los hombres, trabajar en lo mismo que hacen ellos e incluso hacerlo mejor y de manera más eficiente, pero ellos no deben lidiar con todo lo que lidiamos nosotras.

No tienen un ciclo menstrual que hace incomodas muchas actividades, no quedan embarazados y necesitan incapacidad de mas de dos meses, no pasan por la terrible duda sobre continuar con su trabajo o dedicarse a sus pequeños bebes quienes se ven tan vulnerables a los 40 días como para dejarlos en manos de quien se encuentre para cuidarlos.

Sé que hay padres solteros que toman la responsabilidad de sus hijos por completo, pero a ellos nadie los juzga por dejarlos en manos de desconocidos o familiares mientras acuden a trabajar, además ellos no amamantan, ni cargan con la panza durante un embarazo.

Por eso simplemente no es igualdad, y creo entonces que a eso se debe que se celebre un día como hoy. A pesar de los muchos “hombres” que se quejan de darle un día a la mujer y no uno al hombre.

Por mi parte me siento orgullosa, no solo por este día, sino porque a lo largo de mi vida he conocido mujeres que dan para celebrar no un día, sino toda la vida el ser mujer. Desde las que se dedican a su hogar haciendo actividades que yo en mi vida podría organizar tan bien. La gran mayoría trabajadoras que luchan por obtener un ingreso para dar a sus hijos y sus familias todo lo que necesitan, incluso el cariño y tiempo entre las largas horas de trabajo. Las que voluntariamente deciden no tener familia y dedicarse a luchar por sueños distintos, pero no por eso menos importantes. Las que han tenido pruebas tan fuertes a lo largo de su vida y han salido adelante por si mismas y en el mejor de los casos de la mano de un buen hombre. Las que rompen los paradigmas de la sociedad. Todas ellas que han pasado por mi vida dejando una huella que nadie puede borrar, y dejándome la certeza de que si hay mujeres así, este día no se celebra en vano.


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